Gota
¿Qué es la gota?
La gota se caracteriza por inflamación y dolor en las articulaciones, debido a la formación de depósitos de cristales en las articulaciones. También llamada "la enfermedad de los reyes y el rey de las enfermedades", porque estaba relacionado con el exceso de comidas pesadas y vino. La gota afecta con más frecuencia a los hombres que a las mujeres y a menudo se asocia con la obesidad, la hipertensión (presión alta de la sangre), hiperlipidemia (niveles altos de lípidos en la sangre) y la diabetes.
¿Qué causa la gota?
La gota es causada por los depósitos de cristales de urato monosódico en las articulaciones, debido a un exceso de ácido úrico en el cuerpo. El exceso de ácido úrico puede ser debido a que el cuerpo lo produce en exceso, a que los riñones no lo eliminan correctamente o a que se toman en gran cantidad ciertos alimentos que se convierten en ácido úrico en el cuerpo. Entre los alimentos que son ricos en purinas (el componente que se convierte en ácido úrico) se incluyen algunas carnes, el marisco, frijoles y chícharo secos (alverjas secas). Las bebidas alcohólicas y bebidas azucarado altos en fructosa también pueden aumentar los niveles de ácido úrico en el cuerpo. Los ataques de gota pueden producirse por alguno o todos los siguientes:
Consumo de alcohol.
Consumo alimentos ricos en proteínas.
Fatiga.
Estrés emocional.
Cirugía menor.
Enfermedades.
¿Cuáles son los síntomas de la gota?
La gota se caracteriza por ataques repentinos y repetitivos que con frecuencia aparecen sin avisar. La gota grave y crónica puede provocar deformidades. A continuación, se enumeran los síntomas más comunes de la gota. Sin embargo, cada individuo puede experimentar los síntomas de una forma diferente. Los síntomas pueden incluir los siguientes:
Dolor intenso y repentino en una o más articulaciones (con mayor frecuencia en la articulación del dedo gordo).
Inflamación de una o más articulaciones.
La piel por encima de la articulación es de color rojo o morado, con tirantez y brillante.
Calor en el área de la articulación.
Fiebre.
Escalofríos.
Malestar general.
Rápidos latidos del corazón.
Abultamientos duros de los depósitos de cristales de urato bajo la piel (reciben el nombre de tofos).
Los síntomas de la gota pueden parecerse a los de otras condiciones o problemas médicos. Consulte a su médico para el diagnóstico.
¿Cómo se diagnostica la gota?
Además de una historia médica completa y un examen física, un diagnóstico de la gota puede ser confirmado con un examen del líquido de la articulación para ver si contiene cristales de urato.
Tratamiento de la gota
El tratamiento específico para la gota será determinado por su médico basándose en:
Su edad, su estado general de salud y su historia médica.
Que tan avanzada está la condición.
Su tolerancia a determinados medicamentos, procedimientos o terapias.
Sus expectativas para la trayectoria de la enfermedad.
Su opinión o preferencia.
El tratamiento puede incluir:
Medicamentos antiinflamatorios no esteroideos para disminuir el dolor y la inflamación.
Colquicina, un medicamento oral o intravenoso que disminuye el dolor y la inflamación (puede producir diarrea y otros efectos secundarios).
Corticoesteroides para la inflamación.
Aumentar la ingestión de líquidos y evitar las bebidas alcohólicas.
Reducir el consumo de alimentos ricos en proteínas.
Adelgazar, en caso de obesidad.
Medicamentos para disminuir el nivel de ácido úrico de la sangre.
Medicamentos para bloquear la producción de ácido úrico en el cuerpo.
Cirugía para extraer los tofos muy grandes.