Pérdida de la audición
¿Qué es la pérdida de la audición?
La pérdida de la audición es un trastorno médico que afecta aproximadamente a 36 millones de adultos en los Estados Unidos. Los trastornos de la audición pueden tener muchas causas.
Las personas de edad avanzada constituyen el grupo más afectado por la pérdida de audición. Los factores que contribuyen a este trastorno incluyen el ruido excesivo, las drogas, infecciones bacterianas y virales, lesiones o tumores en la cabeza, derrame cerebral y la herencia. Uno de cada tres adultos de más de 60 años de edad sufre pérdida de la audición. Casi la mitad de las personas de 75 a 85 años de edad tienen pérdida de la audición.
Las enfermedades y trastornos que contribuyen a la pérdida de la audición incluyen el tinnitus, la presbiacusia (pérdida auditiva relacionada con la edad) y los factores hereditarios, entre otros.
Tratamiento de la pérdida de audición
En algunos pacientes, la pérdida de audición puede corregirse quirúrgicamente. Para otros, los dispositivos médicos y las terapias de rehabilitación pueden ayudar a menudo a reducir la sordera.
Para determinar la causa exacta de su pérdida auditiva, y cómo debe manejarla, comuníquese con su médico para un examen médico completo. Si usted sospecha que padece de pérdida de audición, responda las siguientes preguntas sugeridas por los Institutos Nacionales de la Salud de los EE.UU. (National Institutes of Health):
¿Tiene problemas para escuchar las conversaciones telefónicas?
¿Tiene problemas para seguir las conversaciones cuando dos o más personas hablan al mismo tiempo?
¿Se quejan la gente de que usted tiene el volumen del televisor demasiado alto?
¿Tiene que esforzarse para entender una conversación?
¿Tiene problemas para oír en un ambiente ruidoso?
¿Tiene que pedir a las personas que repitan lo que le han dicho?
¿Muchas de las personas con las que habla parece que mascullan o que no hablan claramente?
¿No comprende lo que otros están diciendo y da respuestas incorrectas?
¿Tiene problemas para entender el habla de las mujeres y los niños?
¿Se molesta la gente porque usted no entiende lo que ellos dicen?
¿Oye con frecuencia zumbidos, rugidos o silbidos?
Si respondió sí a tres o más de estas preguntas, debe acudir a un otorrinolaringólogo (especialista del oído, la nariz y la garganta), o a un audiólogo para una evaluación auditiva.