Linfoma no Hodgkin (LNH) en los niños
¿Qué es el linfoma no Hodgkin (LNH) en los niños?
El LNH es un tipo de cáncer que comienza en el sistema linfático. El sistema linfático es parte del sistema inmunitario. Ayuda a combatir las enfermedades y las infecciones.
El LNH se produce cuando las células del sistema linfático (linfocitos) cambian (mutan) y se multiplican de manera descontrolada. Estas células pueden propagarse a otros órganos y tejidos del cuerpo (hacer metástasis). El LNH es poco frecuente en los niños. Pero puede aparecer a cualquier edad. Afecta más a los niños que a las niñas.
Hay diferentes tipos de LNH en los niños. Pero la mayoría suele crecer rápidamente. El equipo de tratamiento de su hijo puede solicitar diferentes pruebas según el tipo de linfoma que se encuentre. Las opciones de tratamiento también dependen del tipo específico de linfoma.
¿Cuáles son las causas del linfoma no Hodgkin en los niños?
Los investigadores desconocen la causa exacta del LNH. Los cambios genéticos heredados y algunas infecciones virales pueden aumentar el riesgo de que un niño tenga LNH. Los factores de riesgo que podrían estar relacionados con el LNH incluyen los siguientes:
Infección por el virus de Epstein-Barr, el virus que causa la mononucleosis
Infección por el VIH, el virus que causa el SIDA
Tratamiento anterior contra el cáncer
Ciertas enfermedades inmunitarias que se transmiten de padres a hijos (síndromes hereditarios)
Tomar medicamentos antirrechazo después de un trasplante de órganos
¿Cuáles son los síntomas del linfoma no Hodgkin en los niños?
En muchos casos, el LNH en los niños puede no causar síntomas hasta que haya crecido o se haya propagado. Muchos niños tienen una enfermedad avanzada en el momento del diagnóstico. Esto se debe a que los síntomas comienzan repentinamente y los tumores suelen crecer rápidamente. Un niño puede enfermarse gravemente en muy poco tiempo (algunos días o semanas).
Los signos y síntomas dependen del tipo de LNH y de dónde comienza.
Los síntomas de un tumor en el vientre (abdominal) pueden incluir los siguientes:
Dolor o hinchazón abdominal
Náuseas y vómitos
Fiebre
Problemas para defecar (estreñimiento)
Falta de apetito
Sensación de estar lleno después de comer solo un poco
Los síntomas de un tumor torácico incluyen los siguientes:
Dificultad para respirar o tragar
Dolor con respiraciones profundas
Tos o sibilancias
Sonidos respiratorios agudos
Hinchazón o piel azulada en la cabeza y los brazos
Otros síntomas:
Hinchazón indolora de los ganglios linfáticos del cuello, el tórax, el abdomen, la axila o la ingle
Fiebre sin motivo aparente
Dolor de garganta
Dolor en los huesos y las articulaciones
Sudores nocturnos que empapan pijamas y ropa de cama
Escalofríos
Cansarse fácilmente (fatiga)
Pérdida de peso
Falta de apetito
Picazón de la piel
Infecciones recurrentes
Los síntomas del LNH pueden parecerse a los de muchos otros problemas de salud. Procure que un proveedor de atención médica vea a su hijo para obtener un diagnóstico.
¿Cómo se diagnostica el linfoma no Hodgkin en los niños?
El proveedor de atención médica de su hijo le preguntará sobre la historia clínica, los antecedentes familiares y los síntomas de su hijo. También le hará una exploración física. Según los resultados, es posible que su hijo necesite pruebas como las siguientes:
Análisis de sangre y de orina. La sangre y la orina se recolectan y se analizan en un laboratorio.
Biopsia de los ganglios linfáticos. Se toma una pequeña porción de tejido, llamada muestra, de los ganglios linfáticos (u otras áreas anormales). Esto se hace a menudo durante la cirugía. La muestra se analiza para detectar células cancerosas. Este tipo de biopsia es necesaria para diagnosticar el LNH.
Radiografía de tórax. En una radiografía de tórax se puede observar el corazón, los pulmones y otras partes del tórax. Se puede observar el LNH que se ha propagado a los ganglios linfáticos del tórax.
Tomografía computarizada. Esto se puede hacer para observar el abdomen, el tórax y la pelvis. Para una tomografía computarizada, se usa una serie de radiografías y una computadora para tomar imágenes detalladas del interior del cuerpo. A veces, se coloca un medio de contraste en la sangre para obtener imágenes más claras.
Resonancia magnética. Para esta prueba, se utilizan imanes grandes, ondas de radio y una computadora para generar imágenes detalladas del interior del cuerpo. Esta prueba se puede usar para controlar el cerebro y la médula espinal. O es posible que se haga si no se obtuvieron resultados precisos en las radiografías o en la tomografía computarizada.
Ecografía. También se conoce como sonografía. Se usan ondas de sonido y una computadora para crear imágenes de vasos sanguíneos, tejidos y órganos.
Exploración por tomografía computarizada de emisión de positrones (TEP). Para esta prueba, se inyecta azúcar radioactiva en la sangre. Las células cancerosas consumen el azúcar más rápido que las células normales, por lo que el azúcar se acumulará en las células cancerosas. Luego, se usa una cámara especial para escanear todo el cuerpo y ver dónde se acumuló el azúcar radiactivo. A veces, a través de una tomografía por emisión de positrones, se puede detectar cáncer en diferentes partes del cuerpo, incluso cuando no se pueden observar con otras pruebas. Esta prueba suele hacerse junto con una tomografía computarizada. A esto se lo conoce como exploración mediante TEP/tomografía computarizada.
Biopsia o aspirado de la médula ósea. La médula ósea es un líquido espeso que se encuentra en el centro de algunos huesos. Es donde se producen los glóbulos. Se puede extraer una pequeña cantidad de médula ósea con una aguja. Eso se conoce como aspiración. A veces, se extrae tejido sólido de la médula ósea con una aguja más grande. Esto se conoce como biopsia con aguja gruesa. Generalmente, la médula ósea se extrae de la parte posterior de los huesos de la cadera. Esta prueba se hace para detectar si hay células cancerosas en la médula ósea.
Punción lumbar. Se coloca una aguja larga y delgada en la parte baja de la espalda, entre los huesos de la columna vertebral y dentro del conducto vertebral. Esta es el área alrededor de la médula espinal y del cerebro que contiene líquido, llamado líquido cefalorraquídeo o LCR. El LCR amortigua y sostiene la médula espinal y el cerebro. Se extrae una pequeña cantidad de LCR y se analiza en busca de células cancerosas.
Muestreo de líquido pleural o peritoneal. Se extrae líquido de alrededor de los pulmones (pleura) o del abdomen (peritoneo). El líquido se analiza en busca de células cancerosas.
Estadios
Una parte del diagnóstico del cáncer se conoce como estadificación. La estadificación es un proceso en el que se determina el tamaño del cáncer y si se ha propagado. Se utiliza para decidir las mejores opciones de tratamiento.
Existen diferentes formas de estadificar el LNH. Hable con el proveedor de atención médica de su hijo sobre el estadio del cáncer del niño y lo que esto significa. El sistema más utilizado divide el LNH en 4 etapas:
Etapa I (1). El linfoma está en 1 solo lugar. Está en los ganglios linfáticos en solo 1 parte del cuerpo o es solo 1 tumor que no está en un ganglio linfático. El LNH en etapa I no está en el pecho ni en el abdomen (vientre).
Etapa II (2). El linfoma no está en el pecho y es 1 de los siguientes:
Es solo 1 tumor y está en los ganglios linfáticos cercanos
Está en 2 o más lugares, pero todo está en la parte superior o inferior del cuerpo (ya sea por encima o por debajo del diafragma)
El linfoma comenzó en el tracto digestivo y se puede extirpar todo con cirugía, incluidos los ganglios linfáticos que tengan cáncer.
Etapa III (3). Puede ser cualquiera de estos:
El linfoma es más de 1 tumor fuera de los ganglios linfáticos y puede estar tanto en la parte superior como en la inferior del cuerpo (está por encima y por debajo del diafragma). También podría estar en los huesos o la piel.
Empezó en el pecho.
Comenzó en el abdomen (vientre) y está demasiado extendido como para extirparlo con cirugía.
Hay linfoma al lado de la columna vertebral y quizás en otras partes del cuerpo.
Hay linfoma en más de 1 conjunto de ganglios linfáticos superiores. Y está por encima y por debajo del diafragma.
Hay un linfoma en un hueso que se ha diseminado a los tejidos cercanos.
Etapa IV (4). El linfoma se encuentra en la médula ósea o en el sistema nervioso central (el cerebro y la médula espinal) cuando se detecta por primera vez. También puede estar en otras partes del cuerpo.
¿Cómo se trata el linfoma no Hodgkin en los niños?
El tratamiento dependerá del tipo y estadio del linfoma. El LNH se puede tratar con cualquiera de los siguientes:
Quimioterapia. Para este tratamiento, se utilizan medicamentos que destruyen las células cancerosas o evitan que se multipliquen. Se pueden administrar por vía IV (intravenosa) en una vena, inyectarse en un tejido o tomarse por vía oral. La quimioterapia es el tratamiento principal para el LNH.
Inmunoterapia. Estos medicamentos ayudan al sistema inmunitario de su hijo a detectar y destruir las células cancerosas.
Cirugía. Se puede hacer una cirugía para extirpar los tumores.
Terapia dirigida. Estos medicamentos atacan ciertas partes de las células cancerosas para matarlas sin dañar muchas células sanas. Las células del LNH deben analizarse para ver si tienen las dianas en las que funcionan estos medicamentos.
Quimioterapia en dosis altas con trasplante de células madre. Se toman glóbulos jóvenes (llamados células madre) del niño o de otra persona. Luego, al niño se le administra una gran cantidad de quimioterapia para dañar o destruir la médula ósea. Después de la quimioterapia, las células madre se introducen en la sangre. Con el tiempo, estas reconstruyen la médula ósea.
Radioterapia. En este tratamiento se utilizan rayos X de alta energía u otros tipos de radiación para destruir las células cancerosas o evitar que se multipliquen. No se usa con frecuencia para tratar el LNH en los niños. Pero podría usarse para tratar problemas graves causados por tumores de LNH. Por ejemplo, puede encoger un tumor que esté causando presión o dolor.
Cuidados de apoyo. Todos los tratamientos contra el cáncer pueden causar efectos secundarios. Se pueden usar medicamentos y otros tratamientos para aliviar o prevenir efectos secundarios, como dolor, fiebre, infección, náuseas y vómitos.
Ensayos clínicos. Pregúntele al proveedor de atención médica del niño si existe algún tratamiento que se esté probando y que pueda ser eficaz para su hijo. La mayoría de los niños con cáncer reciben el tratamiento como parte de un ensayo clínico.
El niño necesitará atención de seguimiento durante y después del tratamiento, con los siguientes objetivos:
Comprobar su respuesta al tratamiento
Controlar los efectos secundarios del tratamiento
Evaluar si el cáncer regresa o se propaga
Con tratamiento, la mayoría de los niños con LNH tienen una vida larga. Como sucede con cualquier cáncer, la expectativa de recuperación (pronóstico) del niño varía. Tenga en cuenta lo siguiente:
Recibir tratamiento médico de inmediato es importante para obtener el mejor resultado.
Se necesita atención de seguimiento durante y después del tratamiento.
Se están probando nuevos tratamientos para mejorar los resultados y aliviar los efectos secundarios.
La mayoría de los niños con cáncer se curan.
¿Cuáles son las posibles complicaciones del linfoma no Hodgkin en los niños?
Las posibles complicaciones dependen del tipo y estadio del linfoma. También varían mucho según la ubicación del linfoma y cómo se trata. Los problemas pueden incluir los siguientes:
Daño al corazón y a los vasos sanguíneos
Problemas pulmonares
Cambios en el pensamiento, el aprendizaje y la memoria
Mayor probabilidad de otros tipos de cáncer más adelante en la vida
Dificultad para tener hijos (esterilidad)
Retrasos en el desarrollo y el crecimiento
Muerte
El tratamiento también puede causar efectos secundarios, como los siguientes:
Mayor riesgo de sangrado
Mayor riesgo de infección
Náuseas y vómitos
Diarrea
Falta de apetito
Llagas en la boca
Caída del pelo
Muchos efectos secundarios del tratamiento se pueden tratar para evitar que empeoren. Tal vez hasta haya cosas que usted pueda hacer para prevenir algunos de ellos. La mayoría de los efectos secundarios desaparecen poco después de que finaliza el tratamiento. Pero algunos tratamientos pueden causar efectos secundarios a largo plazo que pueden no manifestarse hasta muchos años después de que su hijo termine el tratamiento. Pregúntele al equipo de tratamiento de su hijo qué puede esperar.
¿Cómo puedo ayudar a mi hijo a vivir con el linfoma no Hodgkin?
Puede ayudar al niño a sobrellevar el tratamiento de muchas maneras. Por ejemplo:
Busque apoyo emocional para su hijo. Busque un consejero o un grupo de apoyo para ayudar al niño.
Asegúrese de que el niño vaya a todas las citas de seguimiento.
Su hijo podría tener problemas para comer. Es posible que un nutricionista pueda ayudarlo.
Quizás su hijo esté muy cansado. El niño tendrá que equilibrar el descanso y la actividad. Anímelo a hacer ejercicio. Esto es bueno para la salud en general. Y puede ayudar a aliviar el cansancio.
Si su hijo consume tabaco, ayúdelo a dejarlo. Si su hijo no consume tabaco, asegúrese de que conozca los peligros y no lo pruebe. También mantenga a su hijo alejado del humo del tabaco de otras personas.
¿Cuándo debe llamar al proveedor de atención médica de su hijo?
Hable con el equipo de tratamiento de su hijo sobre los problemas a los que debe prestar atención. Llame al proveedor de atención médica si el niño presenta lo siguiente:
Síntomas que empeoran
Síntomas nuevos
Efectos secundarios del tratamiento
Es importante saber a qué problemas debe prestar atención y cuándo debe llamar al proveedor de atención médica. Asegúrese de saber a qué número llamar para obtener ayuda después del horario de atención habitual y durante los fines de semana y días festivos.
Información importante sobre el linfoma no Hodgkin en los niños
El LNH es un tipo de cáncer que se produce en el sistema linfático.
Los síntomas dependen de la parte del cuerpo afectada y de la ubicación del tumor. Entre los síntomas más frecuentes, se encuentran la hinchazón indolora de los ganglios linfáticos, la dificultad para respirar, los sudores nocturnos, la fiebre y el cansancio.
Se necesita una biopsia de ganglio linfático para diagnosticar el LNH. También se hacen muchas otras pruebas.
El tratamiento puede incluir quimioterapia y otros medicamentos, trasplante de células madre, radiación y cirugía.
Próximos pasos
Consejos para que aproveche al máximo la consulta con el proveedor de atención médica de su hijo:
Tenga en claro la razón de la consulta y qué quiere que suceda.
Antes de la consulta, anote las preguntas que quiere hacer.
En la visita, anote el nombre de los nuevos diagnósticos y de todo nuevo medicamento, tratamiento o prueba. También escriba cualquier indicación nueva que le dé el proveedor para su hijo.
Sepa por qué se receta un tratamiento o un medicamento, y cómo esto ayudará a su hijo. Conozca los efectos secundarios.
Pregunte si la afección de su hijo se puede tratar de otra forma.
Sepa por qué se recomienda una prueba o un procedimiento y qué podrían significar los resultados.
Sepa qué esperar si su hijo no toma el medicamento, si no se hace la prueba o no se somete al procedimiento.
Si su hijo tiene una cita de seguimiento, anote la fecha, la hora y el objetivo de la consulta.
Sepa cómo comunicarse con el proveedor fuera del horario de atención habitual y en días festivos y fines de semana. Esto es importante en caso de que su hijo se enferme y usted tenga preguntas o necesite ayuda.