Trastornos de la coagulación sanguínea en niños

¿Qué son los trastornos de la coagulación de la sangre en los niños?

Los trastornos de la coagulación de la sangre son un grupo de enfermedades en las que hay un exceso de coagulación.

La coagulación de la sangre es un proceso normal. Evita que sangre demasiado cuando tiene un corte o una herida. Los coágulos pueden reparar los vasos sanguíneos dañados. Los coágulos suelen desaparecer por sí solos.

Pero también pueden formarse cuando no son necesarios y causar problemas graves. Pueden formarse cuando no hay herida ni hemorragia. Pueden obstruir venas o arterias. Esto puede interrumpir el flujo sanguíneo a una parte del cuerpo. Los coágulos pueden impedir el flujo sanguíneo a órganos como el cerebro, los pulmones y el corazón.

Los trastornos de la coagulación sanguínea pueden diagnosticarse en la infancia. Pero es más frecuente encontrarlos durante la adolescencia y la juventud. Estos trastornos suelen ser genéticos, lo que significa que se heredan y están presentes al nacer. Pero es posible que no se presenten síntomas durante muchos años.

Algunos trastornos hereditarios de la coagulación son:

• Factor V Leiden. Este trastorno hereditario aumenta el riesgo de trombosis venosa profunda (TVP) y embolia pulmonar (EP). La TVP es un coágulo que se forma en la parte profunda del cuerpo, a menudo en la pierna. La embolia pulmonar se produce cuando un coágulo se desplaza por el sistema sanguíneo hasta los pulmones. Este trastorno de la coagulación también aumenta el riesgo de problemas con el embarazo, como la pérdida del embarazo (aborto espontáneo). Es el trastorno de la coagulación hereditario más frecuente. Se da con mayor frecuencia en niños cuyas familias proceden de Europa. Muchas personas padecen este trastorno. Pero la mayoría nunca desarrolla coágulos sanguíneos perjudiciales.

• Mutación del gen de la protrombina (G20210). Es el segundo tipo más frecuente de trastorno de la coagulación. Aumenta el riesgo de padecer el mismo tipo de afecciones (TVP, EP y problemas en el embarazo, como retraso del desarrollo fetal y aborto espontáneo). También es más probable que se dé en niños de familias procedentes de Europa. La mayoría de las personas con este trastorno no desarrollan coágulos perjudiciales, como una TVP o una EP.

• Deficiencia de proteína C. Este trastorno puede ser leve o grave. Muchas personas con este trastorno no presentan síntomas ni coágulos dañinos.

• Deficiencia de proteína S. Este trastorno también varía de leve a grave. Al igual que ocurre con la deficiencia de proteína C, muchas personas no presentan síntomas ni coágulos perjudiciales.

• Deficiencia de antitrombina. Este trastorno hereditario aumenta el riesgo de formación de coágulos en las venas. También aumenta el riesgo de desarrollar coágulos sanguíneos durante el embarazo o poco después del parto.

¿Cuáles son las causas de los trastornos de la coagulación en los niños?

Los trastornos de la coagulación en niños suelen ser enfermedades hereditarias. Algunas enfermedades pueden aumentar el riesgo de coágulos sanguíneos.

¿Qué niños corren riesgo de padecer trastornos de la coagulación?

Muchos niños con trastornos de la coagulación no tienen coágulos sanguíneos. Algunas cosas aumentan el riesgo de que se formen coágulos a medida que los niños crecen. Por ejemplo

• Uso de píldoras anticonceptivas

• Cirugía

• Lesiones

• Cáncer

• Estar en cama durante mucho tiempo

• Embarazo y las 6 semanas posteriores al parto (periodo posparto)

¿Cuáles son los síntomas de los trastornos de la coagulación en un niño?

Los trastornos de la coagulación no presentan síntomas. Pero si se forma una trombosis venosa profunda (TVP), los síntomas son:

• Hinchazón en un brazo o una pierna

• Dolor en un brazo o una pierna

• Color rojo, pálido o azulado de la piel

• Enfriamiento o calor en una zona del brazo o la pierna

Una embolia pulmonar es un coágulo de sangre en los pulmones. Se trata de una urgencia. Llame al 911. Los síntomas son:

• Dificultad para respirar

• Dolor torácico

• Latidos rápidos

• Tos

• Fiebre leve

• Desmayos

¿Cómo se diagnostican los trastornos de la coagulación de la sangre en un niño?

El pediatra le hará un historial médico y un examen físico. También examinará los síntomas actuales de su hijo y sus antecedentes familiares. Es probable que el proveedor solicite algunas pruebas.

Los análisis de sangre pueden incluir:

• Recuento sanguíneo completo (CBC). Un hemograma completo analiza los glóbulos rojos, los glóbulos blancos y las células que coagulan la sangre (plaquetas).

• Pruebas de coagulación. Esta prueba comprueba el nivel de factores de coagulación en la sangre del niño y el tiempo que tarda en coagular.

• Pruebas genéticas. Esta prueba detecta defectos genéticos que causan trastornos de la coagulación.

Las pruebas de imagen pueden incluir:

• Ecografía Doppler. Esta prueba muestra el flujo sanguíneo a través de los vasos. Puede ver dónde se localiza un coágulo sanguíneo.

• Angiografía por TC o IRM/ARM. Esta prueba puede ser necesaria si el médico cree que su hijo puede tener una embolia pulmonar o un coágulo sanguíneo cerebral.

¿Cómo se tratan los trastornos de la coagulación de la sangre en un niño?

Es probable que el pediatra le remita a un hematólogo. Éste es un especialista en trastornos de la sangre. Los medicamentos son el principal tratamiento de los trastornos de la coagulación. Incluyen:

• Anticoagulantes. Pueden administrarse por vía intravenosa. También pueden administrarse en forma de inyección o en forma de pastillas que se toman por vía oral.

• Aspirina. Puede utilizarse con anticoagulantes, pero sólo si lo indica el pediatra o un hematólogo. Tomar aspirina puede poner al niño en riesgo de padecer el síndrome de Reye. Se trata de un trastorno poco frecuente pero grave que suele afectar al cerebro y al hígado. Pero para algunos niños, los beneficios de la aspirina al reducir la coagulación de la sangre superan este riesgo. Hable siempre con el pediatra de su hijo.

Es posible que su hijo tenga que tomar un anticoagulante durante mucho tiempo. En momentos de alto riesgo (como una operación quirúrgica), su hijo puede necesitar otros medicamentos para ayudar a controlar o prevenir los coágulos. Estos medicamentos suelen iniciarse durante la hospitalización. Los seguirá tomando en casa, a menudo durante varias semanas o meses.

¿Cuáles son las posibles complicaciones de los trastornos de la coagulación en un niño?

Las complicaciones graves de los trastornos de la coagulación no son frecuentes en los niños. Pero pueden surgir problemas. Las complicaciones incluyen:

• Problemas con el embarazo y el parto cuando el niño se hace adulto

• Embolia pulmonar

• Accidente cerebrovascular, si un coágulo bloquea el flujo sanguíneo en el cerebro

• Muerte

¿Cómo puedo ayudar a mi hijo a vivir con trastornos de la coagulación?

Colabore con el pediatra para prevenir la formación de coágulos. A medida que crezca, ayúdele a evitar las cosas que aumentan el riesgo de formación de coágulos. Por ejemplo

• El sobrepeso

• Ser inactivo

• Utilizar un método anticonceptivo hormonal

• Fumar

Puesto que existen riesgos relacionados con el embarazo, asesórese antes de plantearse un embarazo.

¿Cuándo debo llamar al pediatra?

Llame al pediatra si su hijo presenta síntomas de trombosis venosa profunda, dolor torácico, dificultad para respirar o coágulos en cualquier parte del cuerpo.

Puntos clave sobre los trastornos de la coagulación de la sangre en niños

• Los trastornos de la coagulación de la sangre son un grupo de afecciones en las que hay un exceso de coagulación. Estos trastornos pueden diagnosticarse en la infancia. Pero a menudo se detectan durante la adolescencia y la juventud.

• Muchos problemas de coagulación son hereditarios. Algunos aparecen junto con otras enfermedades.

• Los coágulos sanguíneos pueden causar trombosis venosa profunda, un coágulo sanguíneo en los pulmones (embolia pulmonar) y otros problemas graves.

• Para tratar los problemas de coagulación pueden utilizarse anticoagulantes.

• Un estilo de vida saludable puede ayudar a prevenir los coágulos. Por ejemplo, mantener un peso saludable y hacer ejercicio con regularidad.

Pasos siguientes

Consejos para aprovechar al máximo la visita al pediatra:

• Conozca el motivo de la visita y lo que desea que ocurra.

• Antes de la visita, anote las preguntas que quiere que le contesten.

• En la visita, anote el nombre de un nuevo diagnóstico y cualquier medicamento, tratamiento o prueba nuevos. Anote también las nuevas instrucciones que le dé el pediatra para su hijo.

• Sepa por qué se prescribe un nuevo medicamento o tratamiento y cómo ayudará a su hijo. Sepa también cuáles son los efectos secundarios.

• Pregunte si la enfermedad de su hijo puede tratarse de otra manera.

• Sepa por qué se recomienda una prueba o procedimiento y qué pueden significar los resultados.

• Sepa qué puede esperar si su hijo no toma el medicamento o no se somete a la prueba o procedimiento.

• Si su hijo tiene una cita de seguimiento, anote la fecha, la hora y el motivo de la visita.

• Sepa cómo puede ponerse en contacto con el pediatra fuera del horario de consulta. Esto es importante si su hijo se pone enfermo y usted tiene preguntas o necesita consejo.