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Trastornos de la voz

¿Qué son los trastornos de la voz?

Puede tener un trastorno de la voz si tiene problemas con el tono, el volumen y otras cualidades de su voz. Estos problemas se producen cuando las cuerdas vocales no se mueven o vibran con normalidad.

La voz es el sonido que emite el aire cuando sale de los pulmones y pasa entre las cuerdas vocales. Las cuerdas vocales son los dos pliegues de tejido que hay dentro de la laringe. La vibración de estas cuerdas es lo que produce la voz.

Los trastornos de la voz incluyen:

Laringitis

Las cuerdas vocales se inflaman. Esto hace que la voz suene ronca o que no pueda hablar en absoluto. La laringitis aguda se produce de repente. Suele estar causada por un virus de las vías respiratorias altas. Suele durar entre unos días y unas semanas. El tratamiento consiste en dejar descansar la voz y beber mucho líquido. La laringitis crónica se produce cuando la inflamación dura mucho tiempo. Las causas más comunes son la tos crónica, el tabaquismo, el uso de inhaladores para el asma y la ERGE (enfermedad por reflujo gastroesofágico). El tratamiento de la laringitis crónica depende de la causa.

Paresia o parálisis de las cuerdas vocales

Las cuerdas vocales pueden estar paralizadas o parcialmente paralizadas (paresia). Esto puede deberse a una infección vírica que afecte a los nervios de las cuerdas vocales, a una lesión de un nervio durante una intervención quirúrgica o cuando se coloca un tubo respiratorio en la garganta, a un derrame cerebral o a un cáncer. Si una o ambas cuerdas vocales están paralizadas en una posición casi cerrada, es posible que la respiración sea ruidosa o difícil. Si están paralizadas en posición abierta, puede tener una voz débil y entrecortada. Algunas personas mejoran con el tiempo. En otros casos, la parálisis es de por vida (permanente). La cirugía y la terapia vocal pueden ayudar a mejorar la voz.

Disfonía espasmódica

Se trata de un problema nervioso que provoca espasmos en las cuerdas vocales. Puede hacer que la voz suene tensa, temblorosa, entrecortada, ronca o quejumbrosa. A veces, la voz puede sonar normal. Otras veces, la persona no puede hablar. El tratamiento puede incluir logopedia e inyecciones de toxina botulínica en las cuerdas vocales.

¿Cuáles son las causas de los trastornos de la voz?

Para tener una voz normal, las cuerdas vocales deben tocarse suavemente dentro de la laringe. Cualquier cosa que interfiera con el movimiento de las cuerdas vocales o el contacto puede causar un trastorno de la voz. Muchos trastornos de la voz pueden curarse con tratamiento cuando se diagnostican a tiempo.

Los trastornos de la voz pueden deberse a muchos factores. En algunos casos, se desconoce la causa. Las posibles causas pueden incluir:

  • Crecimientos. En algunos casos, puede formarse tejido adicional en las cuerdas vocales. Esto impide que las cuerdas funcionen con normalidad. Los crecimientos pueden incluir sacos llenos de líquido llamados quistes, bultos parecidos a verrugas llamados papilomas o bultos parecidos a callos llamados nódulos. Puede haber parches de tejido dañado denominados lesiones o zonas de tejido cicatricial. En algunas personas, puede crecer una banda de tejido llamada telaraña entre las cuerdas vocales. Otros crecimientos son una pequeña zona de inflamación crónica (granuloma) y pequeñas ampollas llamadas pólipos. Los tumores pueden tener muchas causas. Entre ellas se incluyen enfermedades, lesiones, cáncer y abuso vocal.

  • Inflamación e hinchazón. Muchas cosas pueden causar inflamación e hinchazón de las cuerdas vocales. Por ejemplo, una intervención quirúrgica, enfermedades respiratorias o alergias, ERGE, algunos medicamentos, la exposición a determinadas sustancias químicas, el tabaquismo, el consumo excesivo de alcohol y el abuso vocal.

  • Problemas nerviosos. Algunas enfermedades pueden afectar a los nervios que controlan las cuerdas vocales. Entre ellas se incluyen la esclerosis múltiple, la miastenia grave, la enfermedad de Parkinson, la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) y la enfermedad de Huntington. La cirugía o la laringitis también pueden dañar los nervios.

  • Hormonas. Los trastornos que afectan a la hormona tiroidea, las hormonas femeninas y masculinas y las hormonas del crecimiento pueden causar trastornos de la voz.

  • Abuso vocal. Las cuerdas vocales pueden sufrir estrés si se ejerce demasiada tensión al hablar. Esto puede causar problemas en los músculos de la garganta y afectar a la voz. El abuso vocal también puede causar un trastorno de la voz. El abuso vocal es todo aquello que tensa o daña las cuerdas vocales. Por ejemplo, hablar demasiado, gritar o toser. Fumar y carraspear constantemente también constituyen abuso vocal. El abuso vocal puede provocar la aparición de nódulos y pólipos en las cuerdas vocales. Éstos alteran el sonido de la voz. En algunos casos, una cuerda vocal puede romperse o estallar debido al abuso vocal. Esto hace que la cuerda sangre (hemorragia). Puede perder la voz. La hemorragia de las cuerdas vocales debe tratarse de inmediato.

¿Cuáles son los síntomas de un trastorno de la voz?

Si tiene un trastorno de la voz, su voz puede sonar

  • Temblorosa

  • áspera o áspera

  • Tensa o entrecortada

  • Débil, susurrante o entrecortada

  • Demasiado aguda o grave o el tono puede cambiar

Puede tener tensión o dolor en la garganta al hablar, o sentir que la laringe está cansada. Puede sentir un nudo en la garganta al tragar. O puede sentir dolor al tocarse la parte externa de la garganta.

¿Cómo se diagnostican los trastornos de la voz?

Si tiene un cambio en la voz que dura varias semanas, es posible que su médico le envíe a un otorrinolaringólogo. El otorrinolaringólogo le preguntará por sus síntomas y cuánto tiempo hace que los tiene. Es posible que le examine las cuerdas vocales y la laringe mediante determinadas pruebas. Éstas pueden incluir:

  • Laringoscopia. Permite al médico ver la garganta. Con la laringoscopia indirecta, el proveedor sostiene un pequeño espejo en la parte posterior de la garganta y brilla una luz en él. Con la laringoscopia flexible, se introduce un laringoscopio delgado e iluminado por la nariz hasta la garganta. Otro tipo de laringoscopio es rígido y puede colocarse en la boca con una lente angular para ver las cuerdas vocales y las estructuras de la garganta.

  • EMG laríngeo (electromiografía). Esta prueba mide la actividad eléctrica de los músculos de la garganta. Se introduce una aguja fina en algunos músculos del cuello. Al mismo tiempo, unos electrodos envían señales de los músculos a un ordenador. Esto puede mostrar problemas nerviosos en la garganta.

  • Estroboscopia. Esta prueba utiliza una luz estroboscópica y una cámara de vídeo para ver cómo vibran las cuerdas vocales durante el habla.

  • Pruebas de imagen. La tomografía computarizada y la resonancia magnética pueden mostrar crecimientos u otros problemas de tejido en la garganta.

¿Cómo se tratan los trastornos de la voz?

El tratamiento de un trastorno de la voz depende de su causa. El tratamiento puede incluir:

  • Cambios en el estilo de vida. Algunos de estos cambios pueden ayudar a reducir o detener los síntomas. Pueden incluir no gritar ni hablar alto. Y descansar la voz a menudo si habla o canta mucho. Si fuma, dejar de fumar también puede ser útil. Los ejercicios para relajar las cuerdas vocales y los músculos que las rodean pueden ayudar en algunos casos. Caliente las cuerdas vocales antes de hablar durante mucho tiempo. Beba líquidos para mantenerse hidratado.

  • Logopedia. Trabajar con un logopeda puede ayudar con ciertos trastornos de la voz. La terapia puede incluir ejercicios y cambios en el comportamiento al hablar. Algunos de ellos pueden incluir la sincronización de las respiraciones profundas para que impulsen su discurso con una respiración adecuada.

  • Medicamentos. Algunos trastornos de la voz están causados por un problema que puede tratarse con medicamentos. Por ejemplo, los antiácidos pueden utilizarse para tratar la ERGE. O la terapia hormonal puede utilizarse para problemas de tiroides u hormonas femeninas.

  • Inyecciones. El médico puede tratar los espasmos musculares de la garganta con una inyección de toxina botulínica. En algunos casos, pueden inyectar grasa u otros rellenos en las cuerdas vocales. Esto puede ayudar a que se cierren mejor.

  • Cirugía. Su médico puede extirpar algunos crecimientos de tejido. Si el cáncer es la causa de los crecimientos, es posible que necesite otro tratamiento. Esto puede incluir radioterapia.

Puntos clave sobre los trastornos de la voz

  • Los trastornos de la voz afectan a la capacidad de hablar con normalidad.

  • Estos trastornos pueden incluir laringitis, parálisis de las cuerdas vocales y problemas nerviosos que provocan espasmos en las cuerdas vocales.

  • La voz puede temblar, estar ronca o sonar tensa o entrecortada. Puede sentir dolor o un nudo en la garganta al hablar.

  • Es posible que su médico le envíe a un otorrinolaringólogo. Este profesional puede realizar determinadas pruebas, incluidas pruebas de imagen.

  • El tratamiento de los trastornos de la voz depende de su causa. El tratamiento puede incluir cambios en el estilo de vida, logopedia, medicamentos, inyecciones y cirugía.

Pasos siguientes

Consejos para aprovechar al máximo la visita al médico:

  • Conozca el motivo de su visita y lo que desea que ocurra.

  • Antes de la visita, anote las preguntas que quiere que le contesten.

  • Acompáñese de alguien que le ayude a hacer preguntas y a recordar lo que le diga su médico.

  • En la visita, anote el nombre del nuevo diagnóstico y de los nuevos medicamentos, tratamientos o pruebas. Anote también las nuevas instrucciones que le dé su médico.

  • Sepa por qué le han recetado un nuevo medicamento o tratamiento y cómo le va a ayudar. Sepa también cuáles son los efectos secundarios.

  • Pregunte si su enfermedad puede tratarse de otra manera.

  • Saber por qué se recomienda una prueba o procedimiento y qué pueden significar los resultados.

  • Sepa qué puede esperar si no toma el medicamento o no se somete a la prueba o procedimiento.

  • Si tiene una cita de seguimiento, anote la fecha, la hora y el motivo de la visita.

  • Sepa cómo puede ponerse en contacto con su proveedor si tiene preguntas, especialmente fuera del horario de consulta y durante los fines de semana y días festivos.