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Trastornos de piernas inquietas en niños con TDAH

Si tiene un hijo con trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), es probable que tenga problemas para prestar atención, estarse quieto o controlar comportamientos impulsivos. Lo que puede resultar menos obvio es que su hijo también tenga problemas para dormir.

Las investigaciones sugieren que los niños con TDAH son más propensos a padecer trastornos del sueño. Entre ellos se encuentran el insomnio, la somnolencia diurna, la respiración dificultosa o anormal durante el sueño (apnea del sueño) y el retraso del sueño. Dos de los trastornos del sueño más comunes relacionados con el TDAH son los movimientos periódicos de las extremidades durante el sueño (PLMS) y el síndrome de las piernas inquietas (SPI). Por estas razones, los niños con TDAH son más propensos a tener somnolencia diurna que los que no padecen TDAH. También son más propensos a padecer SPI. Mientras que el SPI puede afectar a 1 de cada 100 niños, el 44% de los niños con TDAH pueden padecerlo.

Síndrome de las piernas inquietas

El SPI suele aparecer en niños con TDAH. Esto incluye a muchos de los que ya tienen calambres nocturnos y sacudidas en brazos o piernas. Los síntomas del SPI incluyen una incómoda sensación de hormigueo, quemazón o arrastramiento en las piernas cuando el niño se acuesta para dormir. Esto provoca una necesidad casi incontrolable de retorcerse, mover las piernas o sacudirse. Entre los que padecen SPI, hasta el 80% también presentan síntomas de PLMS.

Movimientos periódicos de las piernas o las extremidades (PLMS) durante el sueño

Este trastorno del sueño provoca calambres y sacudidas en los brazos o las piernas del niño durante el sueño. Los movimientos bruscos pueden despertarles. Como estos movimientos suelen despertar a los niños de un sobresalto, pueden causarles problemas para volver a dormirse o para permanecer dormidos.

Los episodios de PLMS pueden durar desde unos segundos hasta casi 2 minutos. También pueden ocurrir con frecuencia. Los episodios pueden repetirse una y otra vez durante varias horas. Pueden alterar gravemente el sueño.

Si su hijo con TDAH pierde horas de sueño debido a estos movimientos involuntarios, la pérdida de sueño resultante puede afectar a su estado de ánimo. Son frecuentes los problemas de comportamiento y la irritabilidad. Los niños con PLMS también pueden presentar síntomas de SPI cuando intentan conciliar el sueño.

Causas

Los expertos aún no conocen a fondo las causas del PLMS y el SPI. Pero están estudiando una posible conexión con el sistema nervioso central. Los estudios sugieren que el SPI está relacionado con la falta de hierro o con problemas para procesarlo, un mineral importante para muchas actividades cerebrales. También se ha relacionado con lesiones nerviosas, enfermedades como la diabetes y ciertos medicamentos, como los antidepresivos y las pastillas antialérgicas que contienen antihistamínicos. En algunos casos, los síntomas del SPI mejoran al suspender el medicamento. También se ha observado que el SPI es hereditario.

Se sabe menos sobre la causa del PLMS. Pero también parece estar relacionado con la carencia de hierro y la anemia. Las enfermedades renales y la diabetes también pueden contribuir.

Los investigadores no saben por qué el TDAH parece estar tan a menudo relacionado con estos trastornos del sueño. Están intentando comprender mejor el vínculo entre ellos.

Cómo afectan estos trastornos del sueño a los niños

Los niños que no duermen lo suficiente pueden sufrir en su vida diaria. Pueden tener dificultades para prestar atención en la escuela o sufrir ataques de agresividad. A diferencia de los adultos, que tienden a ralentizarse cuando no duermen, los niños pueden volverse más hiperactivos cuanto más cansados estén.

En los niños con TDAH, la falta de sueño tiende a empeorar sus síntomas. Un estudio analizó el impacto de mejorar el sueño en niños con TDAH. Descubrió que dormir bien de forma constante ayudaba a limitar y, en algunos casos, incluso a controlar por completo los síntomas de hiperactividad y falta de atención.

Control del TDAH y los problemas de sueño

El TDAH suele tratarse con medicamentos. Pero los medicamentos estimulantes que son eficaces para controlar los síntomas a menudo pueden causar problemas de sueño, como el insomnio. Dado que el insomnio puede empeorar el TDAH, algunos padres optan por no utilizar medicamentos para el TDAH. En su lugar, se centran en la terapia, el asesoramiento y el entrenamiento en habilidades sociales para cambiar el comportamiento del niño. Es importante que un niño que toma medicamentos estimulantes dos veces al día tome la segunda dosis no más tarde de las 2 de la tarde para que sea menos probable que le cause problemas de sueño.

Recuerda que los niños necesitan dormir un determinado número de horas cada noche por su salud. Los niños en edad escolar necesitan de 9 a 12 horas por noche. Los adolescentes deberían dormir entre 8 y 10 horas cada noche.

Éstas son otras medidas que los padres pueden tomar para controlar y prevenir los síntomas y ayudar a los niños con TDAH a dormir mejor:

  • Masajear las extremidades afectadas cuando duelan.

  • Hacer estiramientos.

  • Tener un ritual atractivo a la hora de acostarse y un horario coherente para dormir.

  • Hacer ejercicio con regularidad.

  • Retire la televisión, los videojuegos, el teléfono y el ordenador del dormitorio del niño para crear un entorno de sueño sin distracciones.

  • Apague todas las pantallas de televisión, ordenador, teléfono y tableta al menos 1 hora antes de acostarse.

  • Sea un modelo a seguir. Haga del sueño adecuado una prioridad familiar.

  • No imponga horarios excesivos a su hijo. Los niños necesitan tiempo libre para relajarse.