Calor espinoso
¿Qué es la fiebre miliar?
La fiebre miliar es una erupción cutánea causada por el sudor atrapado en la piel. Normalmente, el sudor viaja a la superficie de la piel a través de pequeños conductos. Si los conductos se estrechan u obstruyen, el sudor queda atrapado en la piel. Esto puede causar enrojecimiento, picor y pequeñas ampollas. La erupción suele aparecer en el torso y los muslos, sobre todo donde la piel se toca con la piel. La fiebre miliar suele ser más frecuente en climas cálidos y húmedos.
¿Cuál es la causa de la fiebre miliar?
La causa de esta afección es el estrechamiento u obstrucción de los conductos sudoríparos. Esto puede deberse a factores que provocan sudoración, como por ejemplo
Clima caluroso y húmedo
Mucha actividad física
Enfermedad con fiebre
Ropa ajustada o de abrigo
Vendajes
Parches medicinales que se adhieren a la piel
Enfermedades que provocan sudoración excesiva (hiperhidrosis)
También puede deberse a:
Algunos medicamentos, como la isotretinoína o los betabloqueantes
Bacterias
¿Quién corre el riesgo de sufrir fiebre miliar?
Tiene más riesgo de sufrir fiebre miliar si suda mucho, pero es más frecuente en niños.
¿Cuáles son los síntomas de la fiebre miliar?
Los síntomas pueden variar de una persona a otra. Pueden incluir
Picor
Irritación en forma de pinchazos
Pequeñas protuberancias o ampollas
Zonas de la piel grandes y enrojecidas
Estos síntomas pueden deberse a otros problemas de salud. Consulte siempre a su médico para obtener un diagnóstico.
¿Cómo se diagnostica la fiebre miliar?
Su médico le preguntará por sus síntomas y su historial médico. Le hará un examen físico. La exploración física incluirá un examen detallado de la piel.
Si tiene síntomas graves, es posible que su médico le haga una biopsia de piel. Le extraerán un pequeño trozo de piel para enviarlo al laboratorio.
¿Cómo se trata la fiebre miliar?
El tratamiento dependerá de sus síntomas, su edad y su estado general de salud. También dependerá de la gravedad de la enfermedad.
La erupción suele desaparecer por sí sola cuando se evita la sudoración. Para ello
Manteniendo la piel fresca y seca
Llevar ropa ligera y holgada
Usar tejidos que permitan que el aire llegue a la piel, como el algodón.
Quitarse los vendajes o parches
Otro tratamiento puede incluir:
Utilizar un exfoliante suave en el baño o la ducha
Crema o loción con corticosteroides para ayudar a reducir el picor y la inflamación
Crema o loción antibiótica si las bacterias son parte de la causa
Polvos secantes
Hable con su médico sobre los riesgos, beneficios y posibles efectos secundarios de todos los medicamentos.
¿Cuáles son las posibles complicaciones de la fiebre miliar?
En raras ocasiones, la obstrucción de los conductos puede dañar las glándulas sudoríparas. Esto se denomina miliaria profunda. Las glándulas sudoríparas dejan de funcionar (anhidrosis). Esto causa problemas para que el cuerpo se enfríe normalmente con el sudor. Por tanto, es más fácil sobrecalentarse (hipertermia).
¿Puede prevenirse la fiebre miliar?
Puede ayudar a prevenir el problema
Permanecer en ambientes frescos
Llevar ropa ligera y holgada
Tomando otras medidas para evitar la sudoración excesiva
¿Cuándo debo llamar al médico?
Llame al profesional sanitario si tiene
Los síntomas no mejoran o empeoran incluso después de seguir los tratamientos recomendados.
Nuevos síntomas
Puntos clave sobre la fiebre miliar
La fiebre miliar es una erupción cutánea causada por el sudor atrapado en la piel. Suele ser más frecuente en climas cálidos y húmedos.
Los síntomas incluyen enrojecimiento, picor y pequeñas ampollas.
La causa es el estrechamiento u obstrucción de los conductos sudoríparos. Puede deberse a factores que provocan sudoración, como el clima cálido y húmedo o la actividad física.
La erupción suele desaparecer por sí sola cuando se evita la sudoración. Esto se consigue manteniendo la piel fresca y seca.
El tratamiento también puede incluir una crema o loción con corticosteroides para ayudar a reducir el picor y la inflamación.
Siguientes pasos
Consejos para aprovechar al máximo la visita al médico:
Conozca el motivo de su visita y lo que desea que ocurra.
Antes de la visita, anote las preguntas que desea que le contesten.
Acompáñese de alguien que le ayude a hacer preguntas y a recordar lo que le diga su médico.
En la visita, anote el nombre del nuevo diagnóstico y de los nuevos medicamentos, tratamientos o pruebas. Anote también las nuevas instrucciones que le dé su médico.
Sepa por qué le recetan un nuevo medicamento o tratamiento y cómo le ayudará. Sepa también cuáles son los efectos secundarios.
Pregunte si su enfermedad puede tratarse de otra manera.
Sepa por qué se recomienda una prueba o procedimiento y qué pueden significar los resultados.
Sepa qué puede esperar si no toma el medicamento o no se somete a la prueba o procedimiento.
Si tiene una cita de seguimiento, anote la fecha, la hora y el motivo de la visita.
Sepa cómo puede ponerse en contacto con su proveedor si tiene preguntas.