Problemas de agarre o succión
En los primeros días de vida, es frecuente que el bebé tenga problemas para agarrarse o mantener la succión del pecho. Si este problema no desaparece, se necesita más ayuda. Un bebé debe ser capaz de extraer suficiente leche del pecho mediante un agarre y una succión correctos para aumentar de peso. Esta extracción de leche le indica a las mamas que aumenten o mantengan la producción de leche. Si el bebé no toma suficiente leche, no aumentará de peso lo suficiente. Una mala extracción de leche del pecho también puede afectar la producción de leche.
Hay muchos factores que pueden afectar la capacidad del bebé para succionar y extraer leche. Algunos factores, como la prematuridad, la ictericia, las infecciones, las enfermedades del corazón, los medicamentos de la madre y muchos otros, pueden influir en la capacidad del bebé para mantenerse alerta o coordinar las acciones de succión, deglución y respiración. Otros problemas mecánicos que pueden influir son la lengua anudada, el labio leporino o el paladar hendido. Estos problemas pueden interferir directamente en la capacidad del bebé de utilizar las estructuras de la boca para succionar con eficacia.
A veces, la causa es obvia. A menudo, no lo es. Pero es importante reconocer los signos de que un bebé no puede extraer leche de forma eficaz durante la lactancia. Entonces, el proveedor de atención médica del bebé puede asegurarse de que no hay problemas de salud o mecánicos que afecten la alimentación. Y se pueden tomar medidas para solucionar el problema.
A continuación se indican algunos signos de succión ineficaz.
En el bebé, si normalmente hace lo siguiente:
No se despierta por sí solo para alimentarse
Quiere alimentarse menos de 8 veces en un período de 24 horas
Quiere alimentarse 14 o más veces en un período de 24 horas
Se agarra al pecho y lo suelta repetidamente
Se aparta o se resiste a mamar
Se queda dormido a los 5 minutos de prenderse o después de mamar solo 2 o 3 minutos
No succiona de forma casi continua durante los primeros 7 a 10 minutos de la toma
Se alimenta de un solo lado durante más de 30 o 40 minutos
Se alimenta durante más de 45 minutos sin mostrarse satisfecho o saciado después de comer
Hace menos de 3 o 4 deposiciones en 24 horas (de 3 a 4 deposiciones al día es normal para un bebé de más de 1 semana y menos de 1 mes)
Tiene gases o hace heces verdes y espumosas después de la primera semana
Moja menos de 6 pañales en 24 horas (un bebé moja 6 pañales al día al final de la primera semana)
Tiene dificultad para tomar leche por otros métodos de alimentación
En la mamá, si cumple con lo siguiente:
Siempre tiene los pezones o la areola doloridos o amoratados
Tiene los pezones rojos, raspados o agrietados
Suele tener los pezones deformados después de las tomas (como arrugados o aplanados)
Rara vez o nunca nota los pechos llenos antes de amamantar y los pechos blandos después de amamantar. Esto es aún más probable si pasan varias horas entre las tomas.
Tiene más de 1 episodio de obstrucción de los conductos galactóforos o mastitis
Cómo puede ayudar en el proceso de lactancia
Cuando un problema de agarre o succión se prolonga más allá de los primeros días tras el parto, puede ser desalentador. La mayoría de los bebés aprenden a mamar con eficacia si se les da tiempo. Pero es importante trabajar con el proveedor de atención médica del bebé y con un especialista en lactancia certificado (IBCLC) si el bebé tiene dificultad con el agarre o la succión. Hasta que se solucione el problema, hay varias opciones. Con ellas, podrá ayudar a que la lactancia progrese mientras se asegura de que su bebé come lo suficiente. Para obtener más información, consulte siempre al proveedor de atención médica de su bebé:
Despierte al bebé para darle el pecho cada 2 o 3 horas si tiene sueño y aún no domina las señales de alimentación.
Es probable que su bebé se sienta mejor durante algunas tomas. No se desanime si tiene demasiado sueño. O si parece olvidarse de una toma a otra.
Algunas tomas serán más largas que otras. Es posible que el bebé necesite tiempo para empezar a mamar en algunas tomas.
Masajee el pecho en dirección al pezón (o use una mano para apretar suavemente el pecho) para enviar leche a la boca del bebé cuando esté mamando. Esto también es útil cuando el bebé empieza a dormirse en el pecho demasiado pronto después de empezar a mamar. Si su bebé se duerme constantemente en el pecho, hable con el proveedor de atención médica para saber cómo ofrecerle más calorías.
Lleve un registro diario del número, la cantidad y el color de la orina y las heces para saber si hay pañales mojados o sucios hasta que mejore el agarre y la succión.
Use un sacaleches eléctrico de uso hospitalario correctamente ajustado para asegurarse de que se extrae toda la leche. Muchas mujeres se extraen leche durante unos minutos después de dar el pecho. La duración de la extracción dependerá de la rapidez con que el bebé aprenda a mamar. También depende de la cantidad de leche que el bebé necesite para crecer más allá de lo que usted le brinda con la lactancia.
Pese al bebé con frecuencia. O registre un peso de prueba antes y después de una toma. Lo mejor es hacerlo en el consultorio de un asesor en lactancia o del proveedor de atención médica del bebé con una balanza de lactancia de calidad médica.
Algunos dispositivos de lactancia o métodos de alimentación alternativos pueden favorecer una succión eficaz. O pueden brindar al bebé una nutrición adicional mientras aprende a mamar. Un dispositivo determinado puede ser bueno para su situación. Pero todos los dispositivos tienen también desventajas. Para evitar problemas, cualquier dispositivo de lactancia debe utilizarse con la orientación de un especialista en lactancia certificado (IBCLC) o un proveedor de atención médica con conocimientos avanzados sobre lactancia materna. Entre los dispositivos que pueden ser útiles en determinadas situaciones, se incluyen los siguientes:
Protector de pezón. Este dispositivo de silicona delgado se coloca en el centro del pezón y la areola. Favorece un mejor agarre, un patrón de succión más eficaz y una mejor ingesta de leche durante la lactancia para determinados bebés.
Sistema de sonda de alimentación. Un sistema de sonda de alimentación puede pegarse al pecho o al dedo. Permite al bebé obtener leche adicional a través de la sonda cuando succiona. Para lograrlo, se conecta una sonda de alimentación delgada a una jeringuilla y se pega al pecho o al dedo (alimentación con el dedo). Luego, usted o un ayudante pueden presionar suavemente el émbolo. De este modo, caen unas gotas de leche en la boca del bebé si se olvida de mamar. También hay sistemas comerciales de sonda de alimentación.
Métodos alternativos de alimentación. También hay otros métodos alternativos de alimentación. Con ellos, se asegurará de que su bebé coma lo suficiente. Pero es menos probable que interfieran con la lactancia materna a largo plazo. Por ejemplo, la alimentación con taza, jeringuilla, cuchara o cuentagotas. Si se usa biberón, suelen preferirse las tetinas con un flujo más lento.
Si se detecta algún cambio estructural en la boca del bebé, colabore con el proveedor de atención médica para corregirlo o tratarlo. Según el tipo de variación, esto puede incluir desde ejercicios bucales hasta tratamiento quirúrgico.
Otras formas de ayudar a un bebé con succión ineficaz
Estos son otros consejos para el bebé:
El contacto piel con piel parece ayudar a muchos bebés con la lactancia. Esto también la ayuda a mantener la producción de leche.
Cuando un bebé tiene la idea básica de succión eficaz pero no parece poder hacerlo de forma constante, pruebe extraerse leche de un pecho mientras amamanta a su bebé en el otro.
Es conveniente que limite el tiempo de cada sesión de lactancia si usted o su bebé se sienten demasiado frustrados. O si las tomas duran más de 40 o 45 minutos. Así, tendrá más tiempo para extraerse la leche de forma eficaz. También le resultará más fácil ser paciente durante el proceso de aprendizaje. Siempre puede extraerse leche y dársela mediante un método de alimentación alternativo.
Quizá puede dejar que el padre del bebé u otros familiares y amigos se encarguen de la alimentación alternativa. Así, no se sentirá abrumada. Y podrá centrarse en la lactancia, mantener las sesiones de extracción y disfrutar de los mimos piel con piel con su bebé.
No deseche ningún dispositivo para amamantar ni ningún método alternativo de alimentación porque no le gustó o porque no funcionó cuando se lo sugirieron por primera vez. El dispositivo o método que no sirvió de ayuda un día puede funcionar de maravilla al siguiente.
Una vez que el bebé esté creciendo y desarrollándose correctamente y su capacidad de succión nutritiva esté mejorando, pregúntele al proveedor de atención médica de su bebé cuándo puede dejar de despertarlo para alimentarlo y espere para saber si muestra señales de alimentación. También querrá saber cuándo es seguro empezar a disminuir las tomas complementarias, si son necesarias.
Siga pensando en positivo. Es normal que se sienta frustrada y que piense que su bebé nunca aprenderá a mamar de forma eficaz. Es normal que algunos días parezcan una eternidad de prácticas de lactancia, tomas alternativas y sesiones de extracción de leche. Es normal que la confianza en una misma suba y baje. Intente mantener la perspectiva teniendo sentido del humor. Piense en cuán lejos su bebé y usted han llegado desde su nacimiento y no en cuán lejos aún puede tener que llegar.
Obtenga apoyo. No pierda el contacto con el proveedor de atención médica del bebé ni con un asesor de lactancia certificado. Pero también póngase en contacto con una organización de asesoría de lactancia. Tendrán mucha información. Y le darán apoyo moral siempre que lo necesite.