Quistes simples de riñón
¿Qué son los quistes simples de riñón?
Los quistes simples de riñón son sacos llenos de líquido que se forman en los riñones. Estos quistes generalmente no afectan el funcionamiento de los riñones. Los riñones son dos órganos con forma de frijol ubicados justo debajo de la caja torácica a ambos lados de la columna vertebral. Filtran grandes cantidades de sangre todos los días. También ayudan a regular el líquido y las sales (electrolitos) de la sangre. Además, eliminan los productos de desecho por medio de la orina.
Los quistes simples de riñón son muy comunes y rara vez necesitan tratamiento. La mayoría de las personas ni siquiera sabe que los tiene. Usted podría tener un quiste simple de riñón o más de uno. Podría tenerlos en un riñón solamente o en los dos. Por lo general, las personas tienen un solo quiste. Con el tiempo, el quiste podría agrandarse lentamente. Pueden ser tan pequeños como un guisante o tan grandes como una pelota de golf.
Los quistes simples de riñón se vuelven más comunes en las personas mayores de 50 años, pero pueden estar presentes desde el nacimiento. Estos quistes afectan más a los hombres que a las mujeres. A medida que se hacen diagnósticos por imágenes con mayor frecuencia, se diagnostican estos quistes en muchas más personas.
Los quistes simples de riñón son diferentes de los quistes complejos de riñón. Los proveedores de atención médica pueden identificar el tipo de quiste en función de su aspecto mediante el diagnóstico por imágenes. Los quistes simples de riñón son el tipo de quiste más común. Tienen paredes delgadas y una forma redonda y regular, y solamente están llenos de líquido. En cambio, los quistes complejos de riñón pueden tener paredes más gruesas y una forma irregular, y también podrían contener material sólido. La presencia de un quiste complejo de riñón puede ser un signo de cáncer, a diferencia del quiste simple de riñón, que no es canceroso.
¿Cuáles son las causas de los quistes simples de riñón?
Los investigadores todavía no están seguros de qué provoca la aparición de quistes simples de riñón. Los riñones tienen túbulos muy pequeños, que son estructuras que recolectan la orina recién producida. Los quistes se pueden formar cuando se bloquean los túbulos. A veces se forman sacos pequeños en los túbulos. Es posible que estos se desprendan y se conviertan en quistes simples de riñón.
Algunas afecciones pueden provocar el crecimiento de los quistes de riñón. Por ejemplo, a una persona que tiene enfermedad renal poliquística se le forman muchos quistes de riñón. (Los quistes pueden ser simples o complejos). Si hay demasiados quistes, es posible que impidan que el riñón funcione adecuadamente.
Otras afecciones que pueden causar quistes simples o complejos de riñón incluyen las siguientes:
Enfermedad renal crónica por cualquier causa (en especial si está en tratamiento con diálisis)
Nefropatía quística medular
Enfermedad renal poliquística autosómica dominante
Síndrome de Von Hippel-Lindau
Complejo de esclerosis tuberosa
¿Quiénes están en riesgo de tener quistes simples de riñón?
Los médicos no saben con exactitud cuáles son las causas de los quistes simples de riñón, pero se presentan con mayor frecuencia a medida que las personas envejecen.
¿Cuáles son los síntomas de los quistes simples de riñón?
La mayoría de las personas no nota ningún síntoma de sus quistes simples de riñón. En contadas ocasiones, pueden aumentar de tamaño al punto de causar lo siguiente:
Sangre en la orina (si el quiste se rompe)
Dolor en la parte alta del abdomen o de la espalda (si el quiste se rompe)
Fiebre y escalofríos (si el quiste se infecta)
Presión arterial alta (si el quiste comprime el riñón)
Problemas para orinar (si el quiste bloquea el uréter, el conducto por el que sale la orina desde los riñones hasta la vejiga)
Detección de una masa en una exploración física
Los quistes simples de riñón no suelen afectar la función renal, a menos que bloqueen el flujo de sangre u orina.
¿Cómo se diagnostican los quistes simples de riñón?
Con frecuencia los quistes simples de riñón se detectan por primera vez con una prueba de diagnóstico por imágenes que se hace por otra razón. El proveedor de atención médica analizará sus antecedentes médicos. Le preguntará sobre sus síntomas recientes y los problemas médicos que haya tenido. También le harán una exploración física.
Es importante distinguir entre quistes simples de riñón y quistes complejos. Los quistes complejos podrían ser cancerosos y, por lo general, es necesario extirparlos. Por este motivo, el proveedor podría indicarle pruebas de diagnóstico por imágenes como las siguientes:
Ecografía del riñón
Tomografía computarizada del riñón (si se necesita una imagen más detallada del quiste)
Resonancia magnética del riñón (si el diagnóstico del quiste aún no queda claro)
Un radiólogo observará las imágenes para saber si el quiste de riñón es simple o complejo. A veces, los proveedores de atención médica clasifican los quistes según el sistema Bosniak por tomografía computarizada. Se clasifican los quistes en cinco categorías, I, II, II-F, III y IV, que se basan en la complejidad y el riesgo de una neoplasia maligna. Si su quiste es de categoría I, probablemente no necesite más pruebas de diagnóstico por imágenes. Los quistes de riñón con una clasificación más alta podrían necesitar más pruebas de diagnóstico por imágenes o tratamiento. Por lo general, los quistes de categoría IV están relacionados con cáncer.
El proveedor también buscará si existen otras afecciones que podrían causar los quistes. Si el diagnóstico aún no queda claro después de las pruebas de diagnóstico por imágenes, le podrían hacer pruebas genéticas. Estas pruebas pueden ayudar a descartar otras afecciones, como la enfermedad renal poliquística.
¿Cómo se tratan los quistes simples de riñón?
Muchas personas que tienen quistes simples de riñón no necesitan tratamiento. Es probable que los proveedores de atención médica quieran vigilar atentamente los quistes. Es posible que necesite una ecografía de los riñones de vez en cuando.
Si tiene síntomas, o si el quiste está bloqueando la circulación de la orina, es posible que necesite uno de los siguientes tratamientos:
Escleroterapia, un procedimiento para hacer una punción del quiste con una aguja larga que se introduce a través de la piel
Procedimiento quirúrgico para que salga el líquido del quiste y para extirpar su tejido exterior
Antibióticos y drenaje para tratar una infección de quiste de riñón
Cuándo llamar al proveedor de atención médica
Llame al proveedor de atención médica de inmediato si comienza a tener posibles síntomas de un quiste de riñón, como sangre en la orina, dolor de espalda o problemas para orinar.
Información importante sobre los quistes simples de riñón
Los quistes simples de riñón son sacos llenos de líquido que se forman en los riñones. Estos quistes, si bien no son normales, generalmente no afectan la función renal.
La mayoría de los quistes simples de riñón no causan ningún síntoma y tampoco necesitan ningún tratamiento.
Mediante las pruebas de diagnóstico por imágenes, el proveedor de atención médica puede determinar si su quiste es simple o complejo. Un quiste complejo podría ser canceroso.
Es probable que necesite repetir las pruebas de diagnóstico por imágenes para controlar el quiste simple de riñón.
Si le causa síntomas, es posible que deban extirpárselo.
Si tiene muchos quistes de riñón, es posible que deban realizarle pruebas para detectar si tiene una afección que los esté causando, como la enfermedad renal poliquística.
Próximos pasos
Consejos para ayudarlo a aprovechar al máximo la visita con su proveedor de atención médica:
Tenga en claro la razón de la visita médica y qué quiere que suceda.
Antes de la visita, anote las preguntas que quiere hacer.
Lleve a un acompañante para que lo ayude a formular las preguntas y a recordar qué le dice su proveedor.
En la visita, anote el nombre de los nuevos diagnósticos y de todo nuevo medicamento, tratamiento o prueba. También anote las instrucciones que el proveedor le indique.
Sepa por qué se receta un tratamiento o un medicamento, y cómo lo ayudará. Conozca los efectos secundarios.
Pregunte si su afección se puede tratar de otra forma.
Sepa por qué se recomienda una prueba o un procedimiento y qué podrían significar los resultados.
Sepa qué esperar si no usa el medicamento o no se realiza la prueba o el procedimiento.
Si tiene una visita de control, anote la fecha, la hora y el objetivo de esta.
Sepa cómo comunicarse con su proveedor si tiene preguntas.