Enterocolitis necrotizante en el recién nacido
¿Qué es la enterocolitis necrotizante en el recién nacido?
La enterocolitis necrotizante (ECN) es una enfermedad grave en los recién nacidos que ocurre cuando el tejido del intestino grueso (colon) se inflama. Esta inflamación daña y mata parte del tejido del colon de su bebé.
Cualquier recién nacido puede tener ECN. Sin embargo, la afección es más frecuente en los bebés muy enfermos o prematuros, sobre todo en el caso de los que pesan menos de 3 libras y 4 onzas (1,500 gramos). Es poco frecuente en los bebés mayores y de mayor tamaño. Cuanto más pequeño y prematuro sea el bebé, más alto es el riesgo de que tenga ECN.
¿Cuáles son las causas de la ECN?
Nadie sabe con exactitud qué causa la ECN. Puede ocurrir si los tejidos intestinales inmaduros de su bebé no reciben la cantidad suficiente de sangre y oxígeno. El contacto entre las bacterias del medioambiente y los tejidos inmaduros parece provocar una respuesta inflamatoria en el cuerpo del bebé. Esto puede dañar los tejidos y causar su muerte. Cuando esto sucede, se produce una perforación en el intestino, lo que puede causar una infección grave en el abdomen del bebé.
¿Cuáles son los niños que corren riesgo de tener ECN?
Varios factores pueden aumentar el riesgo de su bebé de tener ECN.
Nacimiento prematuro
Los bebés prematuros no están tan maduros como aquellos nacidos a término. Esto significa que pueden tener dificultades con la circulación de la sangre y el oxígeno. Su cuerpo no siempre está listo para la digestión y para combatir las infecciones. Esto aumenta la probabilidad de que tenga ECN.
Alimentación con fórmula
Todos los bebés prematuros tienen riesgo de sufrir ECN. Pero aquellos que no reciben leche materna, especialmente de su propia madre, son más propensos a tener la afección. La leche materna contiene sustancias que ayudan a combatir las infecciones y a la maduración de las células intestinales. Además, es más fácil de digerir.
Parto difícil o niveles bajos de oxígeno al nacer
Los bebés cuyo parto fue difícil o que tuvieron niveles bajos de oxígeno al nacer son más propensos a tener ECN. Cuando el nivel de oxígeno es muy bajo, el cuerpo envía primero sangre y oxígeno al cerebro y al corazón. Esto reduce el flujo sanguíneo al tubo gastrointestinal, lo que puede hacer que menos oxígeno de la sangre llegue al colon.
Infecciones intestinales
Los bebés con infecciones intestinales son más propensos a tener ECN.
¿Cuáles son los síntomas de la ECN?
Los síntomas pueden ser diferentes en cada niño. Por lo general, se manifiestan en las primeras semanas de vida. Los síntomas de esta afección son los siguientes:
Hinchazón o distensión abdominal.
La comida no se desplaza por los intestinos.
Líquido de color verdoso (bilis) en el estómago.
Evacuaciones del intestino con sangre.
Los signos de infección son los siguientes:
Respiración que se detiene y vuelve a comenzar (apnea)
Frecuencia cardíaca lenta
Aletargamiento (letargo)
Los síntomas de la ECN pueden ser parecidos a los de otras afecciones. Procure que un proveedor de atención médica vea a su hijo para obtener un diagnóstico.
¿Cómo se diagnostica la ECN?
El proveedor de atención médica de su bebé examinará al niño en busca de signos de ECN.
Es posible que su hijo necesite una radiografía abdominal que permite detectar si los intestinos tienen aspecto burbujeante. También permite observar signos de aire o gas en las venas grandes del hígado de su hijo. También puede haber aire por fuera de los intestinos en el abdomen del niño, un signo que indica que hay una perforación intestinal.
El proveedor de atención médica (el cirujano) de su hijo también puede colocarle un drenaje en la cavidad abdominal. Esto es para eliminar el líquido del abdomen del niño que puede estar infectado y causar daños.
¿Cómo se trata una ECN?
El tratamiento dependerá de los síntomas, de la edad y del estado de salud general de su hijo. También, de la gravedad de la afección. La ECN puede empeorar rápidamente y requerir cirugía. Por lo tanto, para la atención de la ECN, se necesita un equipo que incluya cirujanos pediátricos. Si su bebé está en un hospital que no tiene cirujanos pediátricos, se lo debe trasladar de inmediato a uno que cuente con estos profesionales. En los EE. UU., esto significa un hospital con una unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN) de nivel 4.
El tratamiento inicial puede incluir lo siguiente:
Suspender la alimentación.
Colocarle al niño una sonda desde la nariz hasta el estómago (sonda nasogástrica o NG). Esto se hace para mantener vacío el estómago de su hijo.
Administrarle a su bebé líquidos y alimentos por vía intravenosa.
Darle antibióticos para la infección.
Tomarle radiografías para revisar el progreso de la afección.
Suministrarle oxígeno o usar un respirador. Esto se hace si el abdomen de su hijo está demasiado hinchado y se dificulta la respiración.
Aislar a su bebé. Esto se hace para evitar la propagación de las infecciones.
Si su bebé tiene ECN grave, tal vez necesite lo siguiente:
Cirugía para extirpar el intestino dañado
Un procedimiento que conecta parte del intestino a un orificio en el abdomen (ostomía)
El drenaje de la cavidad abdominal (peritoneal)
¿Cuáles son las complicaciones posibles de la ECN?
La ECN puede causar una perforación en los intestinos de su bebé. Esto hace que las bacterias que están en el interior del tubo gastrointestinal se escapen a la pared intestinal del niño y, a veces, a la cavidad abdominal. Esto causa una infección que puede dañar una sección pequeña o grande del intestino y puede ocurrir rápidamente.
Para un bebé, es difícil combatir una infección intestinal. Incluso con tratamiento, se pueden presentar problemas graves. Los siguientes son algunos de ellos:
Una perforación en el intestino.
Cicatrices o zonas estrechas (estenosis) en el intestino.
Imposibilidad de absorber los alimentos y los nutrientes. Esto puede ocurrir si es necesario extirpar grandes porciones del intestino de su hijo.
Infección grave que puede afectar la totalidad del cuerpo (sepsis).
Muerte.
¿Cómo puede prevenirse la ECN?
Nadie sabe qué causa la ECN, lo que significa que es difícil prevenirla. Si pudiera prevenirse la prematuridad, eso prevendría virtualmente todos los casos de ECN. En los estudios se ha demostrado que los bebés prematuros cuyas madres recibieron corticoesteroides antes del parto son menos propensos a tener ECN. También se ha demostrado que los bebés prematuros alimentados solo con leche de sus propias madres son menos propensos a tener esta afección. Si la leche de la madre no está disponible, la leche materna de una donante proveniente de un banco de leche es más segura que la fórmula. También puede ser de ayuda empezar a alimentar a un bebé prematuro con una pequeña cantidad de leche e ir aumentando lentamente.
Información importante sobre la ECN
La ECN es una enfermedad grave en los recién nacidos muy enfermos, generalmente prematuros, que ocurre cuando el tejido del intestino grueso (colon) se inflama.
Nadie sabe qué causa la ECN. Los bebés de alto riesgo, en especial los prematuros, que son alimentados con fórmula en lugar de leche materna, son más propensos a tenerla.
Por lo general, los síntomas se manifiestan en las primeras semanas de vida de su bebé (mientras el pequeño está en el hospital).
El proveedor de atención médica de su hijo puede hacerle una radiografía abdominal para llegar a un diagnóstico.
El tratamiento dependerá de los síntomas, de la edad y del estado de salud general de su hijo. También, de la gravedad de la afección.
Próximos pasos
Consejos para ayudarlo a aprovechar al máximo la visita con el proveedor de atención médica de su hijo:
Tenga en claro la razón de la visita y qué quiere que suceda.
Antes de la visita, anote las preguntas que quiere hacer.
En la visita, anote el nombre de los nuevos diagnósticos y de todo nuevo medicamento, tratamiento o prueba. También anote las instrucciones que el proveedor le da para el niño.
Sepa por qué se receta un tratamiento o un medicamento, y cómo esto ayudará a su hijo. Conozca los efectos secundarios.
Pregunte si la afección de su hijo se puede tratar de otra forma.
Sepa por qué se recomienda una prueba o un procedimiento y qué podrían significar los resultados.
Sepa qué esperar si su hijo no toma el medicamento o si no se realiza la prueba o el procedimiento.
Si su hijo tiene una visita de seguimiento, anote la fecha, la hora y el objetivo esta.
Sepa cómo comunicarse con el proveedor fuera del horario de atención. Esto es importante en caso de que su hijo se enferme y usted tenga preguntas o necesite ayuda.